Corredores esparcen hongo en el Parque Sinaloa

¿Qué quiere decir esto? Que debido a que no se han cerrado o acordonado las áreas contaminadas con la “pudrición texana”, los deportistas, sin saberlo, trasladan las esporas del hongo en su calzado cuando se ejercitan, lo que contribuye a que esta enfermedad siga afectando a las especies exóticas del lugar, reveló el biólogo Julio Armando Morales Sánchez.

“Ahora tenemos el foco de infección, hay que sacarlo de raíz porque ya es un cáncer, cómo empezar a controlar este tipo de situaciones al interior, y el detalle está en que como es un sitio muy transitado, el hecho de caminar por encima, imagínate, vas diseminando esporas a través de tus zapatos y te metes por un lado, y sales por otro, no hay realmente un control”, precisó.

Sobre la inversión de 4 millones de pesos que señala el Patronato del Jardín Botánico que se requieren para rescatar la flora exótica de la colección de Benjamin Francis Johnston, el especialista en biología expresó que existen otras alternativas como la colaboración con centro de investigación nacionales o de la región.

“Yo creo que para eso tienen a los especialistas, yo creo más bien que sería como el trabajo de colaboración con los centros de investigación con espacios que sea dedicados al tema específico de los hongos, tenemos el Instituto de Biología de la UNAM, tenemos centros de investigación inclusive aquí en la región CIIDIR, la UAS tiene muchos trabajos de investigación en hongos también, escuelas de biología, escuelas de agronomía”.

Por último, expresó que en el municipio se han detectado árboles afectados con la “pudrición texana”, flora endémica, en la cual también se tiene que trabajar para que el hongo no se salga de control.