Sinaloa | 10/02/2018 | Fernanda García
Culiacán, Sin.- La primera sesión ordinaria de la Sexagésima Tercera Legislatura se convirtió en un foro de reclamos en contra del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y entre gritos que señalaban a los diputados de asesinos y corruptos, no se permitía que el coordinador de la bancada, Sergio Jacobo Gutiérrez diera su posicionamiento respecto al inicio de labores.
Entre consignas que pedían a los priistas “aguantar un poco”, así como el pueblo los aguantó por mucho tiempo a ellos, Jacobo Gutiérrez daba su discurso señalando que Sinaloa atraviesa por nuevos tiempos políticos que requieren del diálogo y el respeto, toda vez que los presentes le gritaban “fuera”.
“La presencia de gobiernos divididos, no ha sido un obstáculo para concretar importantes reformas constitucionales y la aprobación de muchas nuevas leyes, pero lo que sí debe de quedar claro desde ahora es que los gobiernos divididos plantean sin duda mayores exigencias para el funcionamiento de las instituciones democráticas, en este caso, para preservar la gobernabilidad y un adecuado desempeño de las instituciones públicas se requiere una gran voluntad y una gran responsabilidad política para negociar, para dialogar”, dijo.
Ante la insistencia de los grupos, entre los que destacaba el patronato por la municipalización de Eldorado, la organización Sabuesas Guerreras, el Consejo de Unidad Ciudadana y el Colectivo de Mujeres Activas de Sinaloa, de no permitir la intervención del diputado, tomó la palabra su compañera de bancada, Gloria Imelda Félix Niebla, quien pedía que hubiera respeto y que el presidente de la Mesa Directiva, Marcos Almaral Rodríguez, pusiera orden.
“Bienvenida la sociedad, bienvenidos esta es la casa del pueblo, tenemos que pugnar por un parlamento del pueblo, tenemos que pugnar por un parlamento que legisle de lado de la sociedad, y nunca detrás de la sociedad, pero también conlleva una responsabilidad de ida y de vuelta, con ello quiero decir que seamos respetuosos”, expresó.
“¿Cuándo has respetado los derechos humanos?”, se escuchó.
Las consignas seguían y el morenista, Pedro Lobo hizo uso de la voz para decir que el Congreso es del pueblo y que siempre serán escuchados y también, Karla Montero Alatorre, del Encuentro Social, aprovechó para promocionarse como legisladora ciudadana, a la vez que reprochaba que anteriormente formó parte de los “indeseables”, a quien se le negaba el acceso al recinto y quienes dijo, eran sacados “a rastras”.
El ánimo entre los priistas subió y entró al quite, Faustino Hernández Álvarez, quien urgía a que hubiera orden.
“De favor y a todo el público en general, de amigos, somos amigos, todos pensamos y creemos, deme la palabra, yo nada más les pido que somos gente civilizada y aquí este honorable Congreso tiene toda la posibilidad de escuchar a la gente que nos visita, pero con respeto, con respeto le pido a mis amigos que están aquí atrás escuchándonos, que dejen dar el posicionamiento de cada partido político y después harán sus sugerencias amigos”, indicó.
El desorden acabó cuando Sergio Jacobo Gutiérrez terminó su discurso y bajó de la tribuna para dar paso a la coordinadora de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Graciela Domínguez Nava.
Aunque fueron menos los pronunciamientos, el coordinador de la fracción panista, Jorge Villalobos Seañez, no se salvó de la crítica, pues al momento de su intervención se escuchó un grito de “ánimo Montana”, recordando aquella escena en la que legisladores federales del Acción Nacional celebraban en una fiesta con mujeres y alcohol.