Sinaloa | 09/12/2019 05:35:00 p. m. | Manuel Aceves
Culiacán, Sin.- Las últimas cuatro lluvias registradas en Culiacán han provocado severos daños en la infraestructura de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, que a decir del Gerente General de la paramunicipal, Jesús Higuera Laura, superan los 30 millones de pesos.
Por mencionar un ejemplo, dijo que las lluvias del jueves provocaron daños en las plantas la Limita que se abastece del río Tamazula y la Isleta del Humaya, lo cual representó interrupción en el servicio a varios sectores y zonas altas de Culiacán.
Añadió que uno de los grandes problemas sigue siendo la basura, la turbiedad del agua que se genera con el arrastre de piedras y escombros.
Dijo entender el malestar de muchas familias que no contaron con el servicio durante varios días, sin embargo en este momento ya se restableció al 100 por ciento, gracias al trabajo del personal de JAPAC, que laboró a marchas forzadas durante 24 horas a fin de garantizar el abasto nuevamente.
“Hemos tenido ese tipo de problemas, afortunadamente ahorita estamos trabajando al 100 por ciento de nuestra capacidad, no tenemos problemas de desabasto, salvo los normales ocasionados por alguna reparación; los apagones también nos han afectado a nosotros, hay que decirlo, eso es en el tema del agua potable”, resaltó.
Añadió que otro de los grandes problemas se presentó en el alcantarillado sanitario por el colapso de los colectores de aguas negras y el brote de éstas, así mismo detalló que este problema tiene su origen mayormente en una falta de cultura ciudadana.
“Se conjugan varios factores, uno de ellos es que en muchas casas de Culiacán, el drenaje pluvial lo tienen conectado al drenaje sanitario, siempre esa agua lleva arrastrando mucha basura que va a dar al drenaje sanitario, aparte, el colector fue diseñado para conducir una cantidad de litros por segundo, si tenemos un colector que fue diseñado para conducir mil 700 litros por segundo, en una lluvia intensa llega a llevar más de 3 mil”, dijo.
Mencionó que éste factor, además del azolve que provoca la basura, más la antigüedad de la tubería, provocan una combinación que termina reventando las tuberías llevando las aguas negras a la superficie.
Mencionó que la obligación de JAPAC es reparar estos problemas de inmediato para evitar brotes infecciosos, sin embargo también es importante que los usuarios contribuyan a no realizar este tipo de conexiones que dañan la infraestructura y se vuelven un problema público.