06/08/2024 12:02:00 p. m.
La ciudad de Los Mochis, en el norte de Sinaloa, se caracteriza por su trazadas calles, planeadas, pero construidas sobre canales que en tiempo de lluvias la misma naturaleza reclama sus cauces, como es el caso de 2018, cuando ocurrió la última inundación, antes de la extrema sequía que azota a esta hermosa ciudad.
La última vez que llovió fuerte y con ganas ya hace varios años, Los Mochis venía también meses con sequía moderada, pero con la temporada de lluvias desaparecía todo rastro seco y los pronósticos en 2018 eran alentadores, precipitaciones propias de la temporada y las recién llamadas tormentas de rápida formación, era la novedad.
Los Mochis siempre se ha caracterizado por ser una ciudad plana, que con la más mínima cantidad de lluvia se inunda, pero en este año, superaría todas las expectativas y nada pudo detener a la naturaleza que descargó su furia en todo el valle cañero.
Previamente, en esa fecha, el titular de Protección Civil, Sergio Liera, del Gobierno en turno, informó en un medio local que se esperaban lluvias por hasta 220 milímetros y llamó a la población a estar alertas, pero nadie se imaginó que en dos días iba a llover lo que un año y sobrevino el diluvio.
Justo el día 19 de septiembre de 2018 en el Golfo de California se formó una depresión tropical, al que llamó el Meteorológico 19-E, que más que aire o vientos huracanados traía abundante lluvia para el norte de Sinaloa y así fue, desató un «diluvio» en esa zona. Luego seguiría Culiacán.
Desde las 10 de la mañana de ese miércoles 19 de septiembre comenzó a llover y llover, tanto que no paró hasta la tarde del día 20.
Cayó tanta agua que la ciudad de Los Mochis y la zona rural del municipio de Ahome, estabas colapsadas, sin servicios pública y algunos fraccionamientos y ejidos tuvieron que ser evacuados, ante la inundación tan seria que se registró.
En el casco urbano se inundaron en:
En la zona rural se rompieron carreteras y desbordaron drenes dejando a El Carrizo, Olas Altas, Cachoana, Jahuara, Poblado 5 y otras comunidades, con serios problemas de inundación.
La lluvia fue tanta que se habilitaron varios albergues en la ciudad y la zona rural para poder atender a los damnificados.
Esa vez la contingencia alcanzó magnitudes inimaginables por la cantidad de agua que cayó en tan pocas horas, 230 milímetros en casi dos días, dejando a la mitad del municipio y el caso urbano sin servicios y con daños serios en casas y negocios comerciales en la ciudad.
En comunidades como Olas Altas, La Cuchilla de Cachoana, la gente tuvo que ser rescatada en lanchas, luego de que Sedena y Marina implementaran acciones de rescate ante la contingencia.
A casi 6 años de ese 19 de septiembre de 2018, el panorama es completamente adverso, en la ciudad no se registra una lluvia considerable desde el 22 de octubre de 2023, con el remanente de la tormenta «Norma», que dejó precipitaciones leves en el norte de Sinaloa.
La sequía excepcional que aqueja a Sinaloa ha obligado al tandeo de agua en la ciudad y en comunidades se limita el servicio por horas, ya que no hay agua en canales ya que las presas cerraron para el uso agrícola priorizando el consumo humano, agua que se lleva en pipas a los pueblos.