Internacional
Bibliocabinas: cabinas telefónicas convertidas en bibliotecas comunitarias
Esta iniciativa promueve la lectura, el intercambio de libros y la reutilización de mobiliario obsoleto en las ciudades.
FOTO: X / Luz Noticias.
Los avances de la tecnología nos han permitido experimentar formas de ocio y comunicación como nunca lo habríamos imaginado: poder hablar con alguien desde cualquier parte del mundo a cualquier hora del día, y cargar miles de libros en la palma de la mano parecieran cosas de ciencia ficción.
Sin embargo, estos mismos avances poco a poco van dejando obsoletas a las antiguas tecnologías y técnicas, que en ocasiones se tienen que reinventar para lograr cosas novedosas.
Tal es el caso de las populares bibliocabinas, las cuales se han ido introduciendo poco a poco a distintas ciudades con la finalidad de promover la lectura tradicional, al tiempo que se recicla infraestructura que de otra forma se convertiría en basura.
Qué son las bibliocabinas
Se trata de un concepto bastante ingenioso, en el que se reutilizan las antiguas cabinas telefónicas que ya se encuentran en desuso. Las clásicas cabinas que podemos observar en películas viejas, donde la gente se introducía e ingresaba dinero para poder hacer una llamada.
Estas cabinas se reutilizan y en su interior se colocan libros físicos de distintas temáticas y los cuales generalmente son donados. Su funcionamiento es muy simple: cualquier persona puede tomar un libro prestado pero antes debe dejar uno.
Con este intercambio se asegura que la bibliocabina siempre cuente con libros en su interior, además de que se estén renovando constantemente, lo que motiva a los lectores a regresar.
Ventajas de las bibliocabinas
Además de ser un uso innovador de las cabinas en desuso, crea una dinámica bastante atractiva para los amantes de la lectura, que sin duda llegan movidos por la curiosidad.
Asimismo, estas bibliocabinas fomentan la lectura colaborativa y el intercambio de libros en lugares públicos, lo que se conoce como «bookcrossing», además de que permiten reutilizar y restaurar mobiliario obsoleto.
Aunque lo mejor, sin duda, es el poder acercar la cultura a cualquier persona que pase junto a estas bibliotecas comunitarias.
